El primer capítulo de esta trilogía del Superclásico fue para el Xeneise, que recién a siete minutos del final logró destrabar un partido que tenía como final el empate.
Los dos mejores equipos del fútbol argentino no hicieron
valer su chapa en cancha, y el encuentro fue parejo, lleno de imprecisiones y
sin un dominador claro, alternando cada conjunto el protagonismo del partido.
El local comenzó y terminó mejor en cancha, mientras que la
visita en una zona gris del trámite tuvo tramos en que dominó el balón y generó
peligro, eso sí, sin pisar el área contraria.
Al minuto 6, Driussi bajó el balón a la puerta del área para
la llegada de Mora en soledad, pero el uruguayo remató desviado.
Devolvió la mano Boca, y a los 9’, Osvaldo de volea conectó
un balón boyando y la pelota dio en el palo. El delantero nacionalizado
italiano volvería a participar con criterio en una jugada siguiente, cuando
tras un centro atrás de Carrizo abrió sus piernas y Chávez sin marca se perdió
la apertura del marcador.
Los de Arruabarrena
volcaban el juego por las bandas, con Carrizo doblegando a un flojo
Vangioni en la marca y con un Chávez desdibujado que perdió casi siempre en la
marca.
Poca fluidez colectiva del Millonario, donde lo mejor se vio
en el corte y recuperación de Kranevitter y la disposición de Rojas en el
mediocampo. El ingreso de Driussi fue una buena decisión de Gallardo, ya que en
el mano a mano el juvenil siempre ganó.
Pasada la mitad, Teo Gutiérrez en una de sus pocas
intervenciones lúcidas, divisó la llegada de Sánchez por el costado derecho y
le dio un pase con ventaja muy bueno, Carlos disparo de primera y el balón reventó
el travesaño. Luego, un tiro libre de Mora se fue el alto.
El inicio del complemento le sentó mejor a River, con Mora a los 8’ probando desde
afuera del área y Orión volando para evitar el tanto de forma espectacular. Más
tarde, un tiro de esquina ejecutado por el uruguayo dio en el ángulo superior
derecho de la valla custodiada por Orión.
Arruabarrena notó que Boca estaba muy impreciso y mejoró el
medio campo del Xeneise con los ingresos de Pérez y Gago, más la entrada de
Pavón , que sería fundamental. Pasada la mitad de hora, River cada vez más se
deshacía más rápido del balón, y
comenzaba a especular con el empate. Los ingresos de Cavenaghi y
Martínez no sóleo fueron infectivos, sino que también trastabillaron lo poco
que River había hecho bien.
Al minuto 38, Osvaldo logró sacar un pase atrás, barios
rebotes en el área, anticipó de Pérez y la pelota cruzó el área hacía Pavón,
quién remató al primer palo y Barovero no pudo evitar el gol de Boca. Tres
minutos más, el arquero tapó un mano a mano pero en el rebote Pérez selló el
resultado cuando Pezzela no logró desviar la trayectoria de la pelota.
De esta forma, Boca se convierte en el único líder del
campeonato y quitándole a River su invicto en el torneo y relegándolo de la
punta de la tabla. En la Copa Libertadores estos equipos se volverán a ver la cara, por ahora, no hay grandes
diferencias entre ambos.
Comentarios
Que pena :(
VAMOS RIVER!!!!
UN saludo
Saludos
Saludos.