Sin dudas, en el Arsenal hay un antes y un después desde la llegada del técnico francés .Desde a poco, comenzó a forjar una idea tanto futbolística como institucional.
Para empezar me remito a los orígenes. Wenger nació en Estrasburgo en 1949. En la universidad de esa ciudad se recibió en ciencias económicas y más tarde fichó para el RC de Estrasburgo. Tras jugar pocos partidos, y ya con el título de entrenador, comenzó a dirigir las juveniles de su club.
Luego de pasar por el Nancy, su labor se hizo conocida en el AS Mónaco, donde ganó dos competiciones y por ejemplo, traer de África a Weah, que luego fue reconocido con el Balón de oro de 1995.
Luego de abandonar Francia, estuvo un tiempo trabajando en Japón. Finalmente llegó al fútbol inglés en Septiembre de 1996 a un club que destinado en su nombre.
Al Arsenal prácticamente lo revolucionó. Apostó a un juego mucho más dinámico, con la importancia en el buen traslado del balón y un ataque casi constante.
Es para recalcar que en materia económica, ayudo mucho a las arcas del club. Wenger prefiere comprar un diamante en bruto antes que una joya ya elaborada. Son innumerables los casos de juveniles que hicieron escuela en el equipo y luego se transformaron en figuras.
Uno de los casos más emblemáticos fue el de Anelka. El francés fue comprado por medio millón de libras y luego fue vendido al Real Madrid por casi 23 millones de libras esterlinas. Con ese dinero Arsene trajo al club a Henry, que conocía de su paso por Mónaco. Tití se convirtió en el máximo ídolo y goleador del conjunto londinense años más tarde.
El “Profesor” fue clave en la recuperación de Tony Adams, acaso otra leyenda viva del equipo londinense.
Los Invencibles, formados entre otros por Bergkamp, Viera, Pires, Campbell y Henry, ganaron la Premier League 2003-2004 sin perder ningún solo juego. En una época el juego desarrollado por el Arsenal fue el mejor del mundo. Wenger ha ganado con los Gunners además otros 11 títulos y fue elegido por la IFHHS mejo entrenador de la década 2001-2010.
El pensamiento del francés influyó enormemente en la construcción del nuevo estadio y del campo de deportes, como así también en la dieta de los jugadores.
El Arsenal y Wenger van de la mano, y a pesar de en los últimos días el malestar de cierta parte de la afición por sus decisiones es muy evidente, no hay que olvidar todo lo que hizo y hará por el club.
Fuentes:
Comentarios
Son procesos, ojalá que le tengan paciencia porque poco a poco irá resurgiendo el buen juego que supo tener, no digo en épocas como la de Bergkamp, Henry, y compañía, pero jugar bien todavía se puede.
Saludos.
EL 10 Y 10 MÁS